ESPIRITU DE LA NAVIDAD

A los 13 años, mi mamá inició en casa el rito del Espíritu de la Navidad, guiada por su vecina. Preparó una noche especial para la familia y algunos vecinos, regalando cofres para que guardaran sus deseos hasta el próximo año. Desde entonces, hemos mantenido el ritual anualmente.

En mi hogar, he adaptado la tradición. Por unos años, dedicamos la noche a cenar y hacer un amigo secreto con amigos cercanos. Al llegar a casa, abría las ventanas y elaborábamos nuestra lista de deseos. Aunque hemos emigrado, continuamos el ritual, cambiando y agregando actividades que mantengan la energía y alegría que experimenté a los 14 años cuando mamá realizó el ritual por primera vez.

Hoy, unimos esta experiencia con el inicio de la preparación de nuestras Hallacas y el amigo secreto familiar. Comienzo el día limpiando la casa para dar la bienvenida al Espíritu de la Navidad. Luego, preparamos el guiso de las hallacas y seguimos con una receta que encontré en Instagram donde predominan los aromas cítricos y la canela, llenando la casa con una esencia increíble. Por la noche, tenemos una cena informal y continuamos con el amigo secreto, esperado ansiosamente por mis hijos. Finalmente, abrimos ventanas y puertas, leemos la oración del Espíritu y cada uno lee su carta del año pasado, agradecemos y las quemamos antes de escribir nuestros nuevos deseos.

Hay miles de rituales y maneras de celebrar, pero en mi caso, es simplemente un día para compartir con seres queridos, intercambiar energías positivas y alegría, y dejar a un lado las preocupaciones diarias. Es un día para llenar el ambiente de felicidad, ser consciente de todo lo que tenemos para agradecer y disfrutar de un tiempo preciado con aquellos que amamos. En resumen, es un día increíble que cada persona o familia personaliza según su propio toque especial. No hay reglas, solo la intención de pasarla bien, agradecer y ser feliz.

Un poco mas de este Ritual