NUEVOS INICIOS

Esta semana ha sido reflexiva y, de alguna manera, ha traído calma y paz. Todo ha fluido de forma natural; lo que debía suceder se ha concretado, y aquello que no nos convenía ha sido cancelado. Cada segundo de la semana se ha disfrutado al máximo.

Esto me llevó a recordar que la recepción de este año fue notablemente diferente. Inconscientemente, pasamos por alto algunas de nuestras costumbres y rituales específicos de esa fecha. Olvidamos preparar una maleta para cada uno, no salimos con ella para atraer viajes al recibir el año nuevo, tampoco optamos por la ropa interior amarilla de la buena suerte ni las lentejas cocinadas para incluirlas en la cena. A medida que transcurrían los minutos, nos dimos cuenta de lo que olvidamos. Sin embargo, la sensación distó mucho de ser frustrante o decepcionante por el olvido; más bien fue una tranquilidad que se mantuvo y permitió disfrutar el momento en familia de una manera diferente. ¿Qué nos indican estos acontecimientos? No tengo la menor idea, pero me siento feliz y satisfecha por recibir el año con alegría, paz y la mejor compañía: mi familia.

Dentro de las primeras actividades que tenía en mente para el inicio de este 2024, era la realización de mi Vision Board, que más que darle ese nombre, fue como un análisis y cierre del año anterior, así como decretos sobre todo lo que espero alcanzar en este nuevo año. Durante la semana han ocurrido ciertos eventos y me he percatado de cosas que había pasado por alto, pero las he asimilado y buscado la mejor salida o solución. También retomé mis hábitos más especiales; en fin, es un inicio diferente, pero con unas energías que me llenan de tranquilidad. Todo comenzó de manera distinta, y así siento que transcurrirá este año: diferente, pero con muchas oportunidades a tu alcance y con la energía para poderlas ver.

Aunque en mi tierra se celebra la navidad hasta el 2 de febrero día en que festejamos la Virgen de la Candelaria, mi mamá siempre quito la decoración navideña un día después de Reyes, y así mantengo la costumbre, ya para después de este día siento que estoy fuera de fecha con la decoración, además que las ganas de organizar la casa se agigantan y es necesario guardar todos los adornos y volver a la tranquilidad. Sin embargo aunque fue el plan de este año, no me sentí  agobiada por la decoración a pesar incluso que esta vez superamos el mes y medio con ella. 

Como es nuestra costumbre, en estos días de descanso nos sumergimos en paseos espontáneos, sin una planificación rigurosa, aprovechando la oportunidad de explorar lugares desconocidos. Generalmente, confirmamos la disponibilidad del destino solo uno o dos días antes, adaptándonos a las demandas del momento, especialmente las laborales de mi esposo. Así es como se despliegan las vacaciones para mis hijos, llenas de aventuras inesperadas. Aunque anhelamos explorar diferentes rincones, reconocemos que el momento adecuado para ello llegará cuando sea más beneficioso para todos. Mientras tanto, continuaremos visitando aquellos lugares que han dejado una huella en nosotros y aquellos que aún permanecen desconocidos. Pronto compartiré más detalles sobre estas vacaciones y los fascinantes sitios que hemos tenido el placer de descubrir. ¡Permanezcan atentos!