EL ENCUENTRO CON "UN CUENTO PERFECTO"
Pero permíteme contarles mi experiencia. En enero, mientras
revisaba los títulos de libros que planeaba leer durante el mes, me encontré
con "Un Cuento Perfecto". Sin embargo, en ese momento no hice la
conexión con la serie que había disfrutado unos meses atrás. Como de costumbre,
me sumergí en la sinopsis y quedé atrapada. Al comenzar a leer, pronto me di
cuenta de que esta era la historia que inspiró la serie que había devorado
anteriormente. Parece que tengo una extraña tendencia a consumir historias en diferentes
formatos sin siquiera buscarlo.
El hecho de leer algo que ya había visto en pantalla me
entusiasmó aún más, aunque debo admitir que solté más de un improperio al
encontrar aquellos puntos de la trama que fueron cambiados de manera radical en
la adaptación televisiva. ¡Qué desesperante puede ser eso!
Pero más allá de las discrepancias entre el libro y la
serie, esta experiencia me llevó una vez más a comprender que en esta vida,
todos los cuentos son perfectamente imperfectos. Depende de los protagonistas
de cada historia decidir si centrarse en esas imperfecciones o amar y disfrutar
su narrativa al máximo. También me hizo reflexionar sobre la idea de juzgar por
las apariencias. En un mundo donde las redes sociales influyen cada vez más en
nuestras percepciones, invito a todos a disfrutar de sus propias vidas, de sus
propias historias. Les aseguro que son las más interesantes y especiales que
poseen. Cada uno es dueño de sus actos, y como bien sabemos, toda acción trae
consigo una consecuencia.
Aunque me encanta
hacer spoilers, sé que no a todos les gusta. Sin embargo, puedo adelantarles
que "Un Cuento Perfecto" es una historia encantadora, sincera y con
un final que se adapta a cada lector. ¿Cómo es eso posible? Bueno, te invito a
leerla y descubrirlo por ti mismo.
¡A disfrutar de la lectura!
Comentarios
Publicar un comentario